Los hidrociclones se utilizan en plantas de biogás para separar inclusiones sólidas del sustrato: arena, suelo, sedimentos minerales. La materia prima se introduce en la parte superior del hidrociclón en dirección tangencial. La aceleración de centrífuga hará que las partículas se muevan hacia las paredes del cono separador, desde donde se hunden en la trampa de "suciedad" a través de un tubo intermedio, seguido de la descarga del sustrato limpio desde la parte superior del separador en dirección axial. Además, el movimiento de vórtice de la suspensión crea una zona de rarefacción, que arrastra la parte purificada del flujo interno y la lleva más allá para las necesidades tecnológicas. Se han previsto dos pozos en la trampa de "suciedad"para controlar el proceso de hundimiento. Las partículas pesadas se eliminan mediante la adición de agua de reflujo a la trampa de "suciedad". La alta adaptabilidad a cualquier nivel de contaminación en el sustrato se logra ajustando los ciclos de válvula y trampa de "suciedad".